Comprar viviendas okupadas: regulación, ventajas e inconvenientes
13 Sept.- Siempre que exista la pertinente demanda, la oferta permanecerá
constantemente presente. Y en una sociedad cada día más encarecida, donde los
precios de las viviendas alcanzan valores exorbitantes, no es de extrañar que
surja la situación de compraventa de viviendas okupadas. ¿Puede esto
considerarse legal?, ¿cuáles son los beneficios y obstáculos que conlleva este
tipo de transacción? Si no lo sabes, estate atento a este post, en Desokupa
Expres [https://www.desokupaexpres.com/] te lo contamos con detalle.
La venta de propiedades ocupadas es un asunto legal y éticamente complejo. Bajo
nuestro ordenamiento, no está permitido comercializar con artículos prohibidos o
futuros, los denominados “objetos fuera del comercio”. Estos objetos abarcan
elementos como personas o posesiones obtenidas a través de acciones delictivas.
Por esta razón, es fundamental investigar y comprender las leyes locales antes
de involucrarse en la compra de una propiedad ocupada.
Pues bien, las transacciones vinculadas a pisos okupados sí son consideradas
legales. A pesar de que la usurpación de vivienda que estos llevan aparejada no
lo sea —según el artículo 245 del Código Penal—, siempre que el comprador esté
al tanto de la situación, podrá participar lícitamente en este acuerdo.
Es decir, realizar actos de comercio con estas viviendas, es una actividad
completamente lícita y regulable, y el “mercado okupa” es ya una realidad actual
y plausible en muchos lugares.
Estas operaciones se introducen como un negocio novedoso que presenta una
dinámica de la que se pueden beneficiar tanto vendedores como compradores.
Para los vendedores esta posibilidad se presenta como una forma de deshacerse de
la vivienda, y del problema de la ocupación, evitando juicios interminables y
costosos, que podrían no ser viables en términos de tiempo y recursos.
Por otra parte, los compradores pueden obtener la propiedad a un precio
potencialmente inferior debido a la situación de ocupación ilegal, que devalúa
el valor de la vivienda en el mercado. Si bien, si estos desearan quedarse con
la propiedad, deberán primero abordar la ocupación, respetando los
procedimientos legales establecidos; actuando a través de los cauces
jurisdiccionales, o recurriendo a empresas reconocidas como nosotros, realizando
el proceso de desocupación de manera, legal, rápida, transparente y efectiva.
A nivel legal, el contrato de compraventa es similar a los de cualquier otra
compra de viviendas tradicional, si bien, debido a la situación particular de
ocupación ilegal, es necesario establecer cláusulas específicas para abordar las
responsabilidades y obligaciones de ambas partes de manera adecuada. Por
ejemplo, dado que la vivienda ya está ocupada, es posible que existan daños o
modificaciones efectuadas por los ocupantes ilegales, en este caso, es
importante determinar sobre quién recaerá el pago de los posibles desperfectos.
En este caso, es viable (y recomendable) solicitar un certificado de
inexistencia de valor de referencia al catastro, el cual servirá de prueba
fehaciente de la condición de la casa.
Cabe destacar que el antiguo propietario, ante esta situación, puede proceder a
dar de baja el suministro de luz y agua sin preocupaciones acerca de futuros
reproches jurídicos, pues el seguro de la vivienda pasa a ser del nuevo
comprador. Esto es fundamental pues, como analizábamos en anteriores
publicaciones, esta circunstancia podría eventualmente constituir un delito de
coacción.
Adicionalmente, tal y como hemos mencionado, aunque se pague el precio de
adquisición, esta vivienda no podrá ser habitada hasta dar solución al problema
de la ocupación.
Como podemos ver, adquirir una propiedad ocupada conlleva riesgos y desafíos
significativos, como la incertidumbre legal, o el coste adicional de llevar a
cabo procesos de desokupación.
Estas posibles complicaciones han de ser analizadas previamente y abordadas con
cautela. Pues, como añadido, el estado en el que la vivienda se encuentre no
puede ser valorado sino únicamente mediante tasado en línea o por comparación,
en relación con viviendas similares.
Pese a ello, si la propiedad se considera comercializable en su estado actual
(teniendo en cuenta la circunstancia aparejada), la venta de propiedades
ocupadas puede ser una opción especialmente relevante y rentable para algunos
compradores, especialmente aquellos que buscan oportunidades de inversión.
En el caso de que finalmente se lleve a cabo la transacción, empresas como
Desokupa Expres, nos encontramos al servicio del comprador y plenamente
disponibles para poner fin a la problemática de la okupación de esta nueva
propiedad, siempre actuando dentro de los cauces legales.
Como empresa especializada, conocemos los límites legales y contamos con
profesionales jurídicos
[https://www.desokupaexpres.com/servicios/asesoramiento-juridico/] que ofrecen
asesoramiento legal, altamente recomendable para que el comprador pueda resolver
los problemas a los que se ha de enfrentar adecuadamente, sabiendo en todo
momento que se actúa conforme a las normas actualizadas.
Infórmate de nuestros servicios sin compromiso en info@desokupaexpres.com o
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